proceso comienza cuando una zona caliente de la superficie terrestre calienta el aire adyacente por radiación y crea una gran burbuja de aire cálido que permanece en el suelo.
Como esta burbuja de aire está relativamente caliente en comparación al
aire frío más denso que se encuentra sobre ella, la burbuja se eleva de
forma similar a un globo.
A medida que esto sucede, el aire se expande y se enfría.
Por fin, la burbuja de aire ascendente se enfría por debajo del punto
de rocío y el vapor de agua que contiene se condensa sobre las diminutas
partículas de polvo y sal presentes para formar gotitas de agua o
cristales de hielo.
Pero en este momento, la burbuja de aire es demasiado fría y pesada para
ascender a mayor altura y permanece en el cielo en forma de nube.
Las nubes se forman cuando el aire se eleva calentado por la irradiación
terrestre. Cuando se calienta, el aire sube y se eleva hasta su punto
de rocío, momento en el cual el vapor de agua se condensa en pequeñas
gotitas de agua o cristales de hielo. La forma de las nubes varía al
igual que su textura, dependiendo del calor que las impulse, la
composición atmosférica y el viento que las empuje determinando su
altura.
Las gotas de agua que forman las nubes son esféricas y muy pequeñas
(entre 0,004 y 0,1mm). Estas gotas se encuentran suspendidas en el aire y
sometidas a corrientes ascendentes y otras fuerzas, de tal forma que se
encuentran en constante movimiento dentro de la nube, chocando unas con
otras y agrupándose entre ellas. Según las condiciones atmosféricas
existentes, se puede producir un aumento de su espesor hasta el punto de
que su peso supere las fuerzas ascendentes y caigan hacia la tierra en
forma de lluvia o precipitación.
Mecanismos de formación
El principal método para lograr el proceso de condensación consiste en
enfriar una masa húmeda de aire para conseguir su punto de rocío. Y este
proceso es el que da lugar a la formación de nubes, pues el aire
caliente que se encuentra en las capas bajas se enfría al ascender a
cotas superiores. Al alcanzar la temperatura de punto de rocío ya no
puede retener toda su humedad en forma de vapor, que se condensa
rápidamente.
Las causas que provocan este enfriamiento son diversas:
Una corriente de aire puede ser forzada a ascender cuando encuentra una
pronunciada elevación de terreno en su camino, ya sea una montaña o una
cordillera. El flujo de aire es perturbado de tal manera que sube a la
altura suficiente para sortear el obstáculo. Al elevarse se enfría y
condensa, dando lugar al nacimiento de nubes, principalmente cúmulos y
altocúmulos, que adoptan muchas veces la forma lenticular, es decir,
como una lente gigantesca.
Una corriente de aire también puede elevarse cuando dos masas de
diferentes tipos de aire se encuentran, o sea, cuando una masa de aire
caliente tropieza con una "montaña" de aire frío, formando lo que se
denomina un frente, que es el límite que separa una región de aire
caliente de una de aire frío.
Si esas dos masas se mueven a distintas velocidades, la más cálida se
desliza sobre el frente, ascendiendo a niveles superiores. Por este
procedimiento, algunas veces llegan a alcanzar cotas de miles de metros.
A medida que el aire va elevándose hacia la cima del frente, se van
formando distintos tipos de nubes, siendo más espesas cuanto más cerca
están del suelo y dan lugar a lluvia o nieve en la parte más baja. Este
sistema puede designarse como frontal o ciclónico.
Además el aire también puede elevarse por sí mismo al calentarse, dando
lugar a las corrientes de convección. Este proceso es muy corriente en
los días calurosos de verano, pues el aire cercano al suelo se calienta
rápidamente a causa del calor desprendido por la tierra y el irradiado
por el Sol, por lo que se vuelve más liviano que el que le rodea y
asciende. Esto da lugar especialmente a cúmulos, pero cuando las
corrientes de convección son fuertes o penetrantes, se forman los
cumulonimbos o nubes de tormenta, tan característicos del verano.
Frentes
Cuando dos grandes masas de aire con temperaturas distintas y uniformes
se encuentran, se produce un choque que genera una variación brusca de
la humedad y de la temperatura. La línea de choque se llama "frente"
Se llama frente frio cuando el aire frio avanza hacia el caliente y
frente cálido si el aire caliente se abre paso hacia el frio. La zona
alterada como consecuencia del choque se llama ciclón, borrasca o
depresión. Por el contrario, la zona donde la atmósfera es más estable,
con altas presiones, se llama anticiclón.
Las isobaras son las líneas que unen los puntos en que la presión
atmosférica al nivel del mar es la misma. Suelen expresarse en milibares
y son muy útiles para la predicción meteorológica. En ocasiones las
isobaras forman familias de curvas encerradas unas en otras alrededor de
una región donde la